A persiana baja: ni las cuotas ni las promos reactivan el consumo
El consumo no levanta y las pymes entran en zona crítica. Ni los descuentos del 50% ni los nuevos planes de cuotas alcanzan para sostener la actividad. El ajuste libertario deja comercios vacíos y cajas en rojo.

BUENOS AIRES – 29 de junio de 2025 – El consumo interno se desploma y arrastra consigo a miles de pequeñas y medianas empresas. Según CAME, las ventas minoristas volvieron a caer en mayo, profundizando una crisis que ya lleva más de un año. “Es una caída sobre otra caída”, alertó Salvador Femenia, vocero de la entidad. El rebote de fin de 2024 duró poco: la realidad volvió a imponerse y los comercios enfrentan un escenario de ventas congeladas, tarifas en alza y una presión fiscal que no cede.
Los locales hacen lo imposible para sobrevivir. Ofrecen descuentos agresivos, productos a mitad de precio y hasta 12 cuotas sin interés. Incluso CAME lanzó su propio programa, Cuotas MiPyME, con tasas promocionales para financiar compras en 3 y 6 pagos. Pero nada alcanza. El problema de fondo es otro: no hay plata en la calle. “El 50% de los argentinos no llega a fin de mes. ¿Qué sentido tiene ofrecer cuotas si nadie puede pagar ni la primera?”, disparó Femenia. En paralelo, el Gobierno sigue sin mover un solo impuesto a la baja.
El relato del superávit fiscal choca con la persiana baja del almacén, la pizzería y el bazar. Mientras Milei autocelebra sus fórmulas mágicas, los comerciantes enfrentan una cuenta imposible. El costo fijo sube, las ventas bajan y el Estado no da respiro. “Esta estructura impositiva es incompatible con cualquier intento de reactivación”, sentencian desde CAME.